Bogotá, 06/04/2014
Construcción Vertical para la Universidad CES
Construcción vertical para el CES
La ampliación consistió en la construcción de un nuevo edificio de Bienestar, parqueaderos y la remodelación del edificio administrativo.
«El estudiante y su interrelación con el espacio fue el eje central del diseño arquitectónico, buscando ofrecer diferentes tipos de espacios para las actividades académicas y sociales», cuenta el arquitecto Diego Parra, de Condiseño Arquitectos, a quien realizamos varias preguntas sobre el proyecto.
De tal forma el nuevo edificio de bienestar universitario cuenta con múltiples servicios para el beneficio de la comunidad universitaria y de las unidades residenciales vecinas.
El proyecto consta de dos bloques destinados a un edificio de Bienestar y un edificio de Parqueaderos. El edificio de Bienestar tiene 10 pisos para desarrollar actividades extra académicas: cocina taller, talleres de pintura y artes plásticas, salón de música, aulas para yoga y artes marciales, salones, consultorios médicos, las oficinas del Departamento de Bienestar Universitario y Deportes.
Entre los espacios deportivos se encuentran 4 canchas de squash, mesas para tenis de mesa, un centro de acondicionamiento físico, una cancha de fútbol en grama sintética y un coliseo mayor para la práctica de baloncesto, voleibol y fútbol sala con capacidad para 700 personas sentadas en tribunas.
Es importante señalar que el proyecto tiene muchos retos desde el punto de vista del terreno. Parte de la novedad del edificio de Bienestar es que la gran mayoría de universidades de Medellín son construidas en espacios abiertos. Pero en esta zona de la ciudad, El Poblado, es difícil tener un campus abierto. Los arquitectos que manejaron el proyecto estuvieron previamente en Canadá observando cómo lo hacían y cómo construían a la altura estos campus universitarios.
«Nuestra mayor dificultad fue articular una gran densidad de usos en altura por las características del terreno, por eso en el momento de su concepción se creó la necesidad de un edificio de fácil recorrido horizontal y verticalmente», aclara el arquitecto.
Arquitectónicamente el proyecto se caracteriza por crear espacios abiertos permitiendo que el estudiante pueda apropiarse de estos de diversa manera, con ambientes absolutamente articulados y continuos. Los espacios pueden utilizarse durante todo el día gracias a la iluminación natural.
Uno de los principales objetivos de la Universidad CES con este proyecto era el de integrarse con el entorno y compartir beneficios con los vecinos, como lo dijo Alejandro Velásquez, Coordinador Administrativo de la Universidad CES. Por eso es clara la necesidad de los diseñadores de insertarse naturalmente en el entorno residencial, primero con la utilización de materiales propios del sector donde se emplaza el proyecto y típicos de la ciudad, como el ladrillo y otros de fácil mantenimiento beneficiosos para el proceso de uso de la universidad.
De la misma manera, la accesibilidad fue un eje principal en la concepción de la continuidad de los espacios, evitando obstáculos y permitiendo el uso por parte de cualquier persona. Por último, nos cuenta el arquitecto Diego Parra, es evidente cómo la comunidad académica ha recibido con emoción la creación de espacios nuevos para el desarrollo de la actividad académica y social, permitiendo la ampliación del campus universitario y consolidando a la institución dentro del ámbito universitario del país.